1 Plantin Sandia
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- La sandía (Citrullus lanatus) es una planta herbácea monoica que se presume originaria de África, donde aún crece silvestre. Su cultivo es ampliamente difundido en el país y se consume generalmente cruda como postre, siendo una fruta refrescante con bajo contenido calórico.
- Morfología Similar al Melón: En términos de morfología, la sandía se asemeja al melón, con una raíz principal profunda y tallos rastreros que pueden extenderse entre 2 y 3 metros de largo.
- Temperatura: La sandía requiere condiciones elevadas de temperatura para germinar y crecer. La temperatura óptima para la germinación oscila entre 21 y 35 °C, y durante el crecimiento, se prefiere un rango de 21 a 30 °C. Se debe tener precaución con temperaturas superiores a 35 °C, que pueden requerir riegos adicionales.
- Tiempo de Cosecha y Consideraciones Cultivares: La cosecha de la sandía generalmente ocurre 80-100 días después de la siembra. Se realiza cuando el fruto emite un sonido ahuecado, muestra color amarillo en la parte inferior y la piel se desprende fácilmente con la uña. Se recomienda realizar una labor profunda debido a la raíz principal extensa.
- Manejo de Malas Hierbas y Poda: La sandía es susceptible al crecimiento de malas hierbas y generalmente se utiliza acolchado de polietileno negro. En pequeños cultivos, la limpieza manual de malas hierbas es posible. No suele requerir poda, simplemente se eliminan frutos deformados o podridos. En casos excepcionales, se pueden recortar las ramas que se extienden más allá de la línea de cultivo.
- Aspectos del Suelo y Abono: Para el cultivo de sandía, se recomienda seguir los principios de la agricultura ecológica, utilizando abonos orgánicos como compost o estiércol aplicados un mes antes del trasplante. La sandía prospera en suelos de textura media o limosos con buena capacidad de drenaje y pH ligeramente ácido (5-6.8). Su resistencia a la salinidad es moderada.
- Importancia del Riego: Aunque puede desarrollarse en secano, la sandía muestra su mejor rendimiento en condiciones de regadío. Se necesita un riego constante, especialmente desde la floración hasta el final del crecimiento de los frutos. Después de este período, se recomienda controlar el riego para prevenir el rajado del fruto.
- Estrategias de Riego: Después del trasplante, se aconseja un riego ligero para asentar la planta. En riegos posteriores, se busca mantener un nivel adecuado de humedad en el suelo, evitando encharcamientos pero asegurando disponibilidad de agua para las raíces. Para obtener sandías grandes y jugosas, es crucial mantener una humedad constante durante el crecimiento, regulando los riegos y reduciéndolos hacia el final para aumentar la concentración de azúcares.
- Importancia de la Polinización: La polinización de las flores de sandía es fundamental para obtener buenas cosechas. Aunque no es necesario tener colmenas propias, crear un entorno propicio para insectos beneficiosos, como abejas y abejorros, favorece una exitosa polinización.
Cultivar sandías requiere atención a diversos aspectos, desde la temperatura hasta el manejo del suelo y el riego, asegurando un entorno propicio para un desarrollo saludable y una cosecha exitosa.
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