Sub 4. La Botánica es una Ciencia :
Nos han preguntado mucho al respecto del uso de fertilizantes naturales y orgánicos en el huerto. El empleo de estos fertilizantes se ha convertido en una práctica cada vez más popular entre los jardineros y agricultores conscientes de la importancia de cultivar de manera simbiotica y respetuosa con el medio ambiente.
Los fertilizantes naturales y orgánicos se derivan de fuentes renovables, como compost, estiércol animal, residuos vegetales, algas marinas y otros materiales orgánicos. A diferencia de los fertilizantes químicos sintéticos, estos productos naturales no contienen sustancias tóxicas ni causan daños a largo plazo en el suelo.
Al utilizar fertilizantes naturales y orgánicos, estás enriqueciendo tu suelo con nutrientes esenciales, como nitrógeno, fósforo y potasio, así como con una amplia gama de micronutrientes. Estos nutrientes son absorbidos gradualmente por las plantas, lo que promueve un crecimiento saludable, aumenta la resistencia a enfermedades y mejora la calidad de los cultivos.
Además, los fertilizantes naturales y orgánicos mejoran la estructura del suelo, aumentando su capacidad de retención de agua y mejorando la aireación, lo que a su vez favorece el desarrollo de las raíces y la actividad microbiana beneficiosa.
A continuación mencionamos algunos:
1. Compostaje:
El compostaje es el proceso de descomponer materia orgánica, como restos de alimentos, hojas y recortes de césped, en un abono rico en nutrientes. El compostaje es una excelente manera de enriquecer el suelo con nutrientes y materia orgánica. Los nutrientes contenidos en el compost incluyen nitrógeno, fósforo y potasio, así como micronutrientes como zinc, hierro y manganeso.
Para hacer compost, simplemente recoja materiales orgánicos y colóquelos en un montón en su jardín. Agregue agua y revuelva el montón regularmente para promover la descomposición. Una vez que el compost esté listo, puede agregarlo al suelo alrededor de sus plantas para proporcionar nutrientes.
2. Abono verde:
El abono verde es un tipo de cultivo que se siembra específicamente para mejorar la calidad del suelo. Los cultivos de abono verde incluyen plantas como la alfalfa, el trébol y la mostaza. Estas plantas se cultivan durante un período de tiempo específico y luego se cortan y se agregan al suelo como fertilizante. Las plantas de abono verde son excelentes para agregar nutrientes al suelo y mejorar la estructura del suelo.
Para utilizar el abono verde, simplemente siembre las semillas de las plantas de abono verde en su jardín y déjelas crecer durante el período de tiempo recomendado. Luego, corte las plantas y agréguelas al suelo para enriquecerlo con nutrientes.
3. Estiércol:
El estiércol es una excelente fuente de nutrientes orgánicos para el suelo. El estiércol contiene nitrógeno, fósforo y potasio, así como otros nutrientes esenciales para las plantas. Sin embargo, es importante tener cuidado al usar estiércol fresco, ya que puede quemar las plantas. Lo mejor es dejar que el estiércol se cure durante unos meses antes de usarlo como fertilizante.
El estiércol puede provenir de varios animales, como vacas, caballos, ovejas y pollos. Para utilizar el estiércol, simplemente agréguelo al suelo alrededor de sus plantas en pequeñas cantidades y mezcle bien con el suelo. Tipos de Sustrato
4. Harina de hueso:
La harina de hueso es una excelente fuente de fósforo y calcio, dos nutrientes esenciales para el crecimiento de las raíces de las plantas. La harina de hueso se hace moliendo huesos de animales y se utiliza como fertilizante.
Para utilizar la harina de hueso, simplemente agréguela al suelo antes de plantar o esparza la harina de hueso alrededor de las plantas existentes. La harina de hueso es de absorción lenta, por lo que es mejor usarla como un fertilizante a largo plazo.
5. Fertilizantes líquidos orgánicos:
Existen muchos fertilizantes líquidos orgánicos disponibles en el mercado, que están hechos de ingredientes naturales como el pescado, las algas marinas y el guano de murciélago. Estos fertilizantes son ricos en nutrientes esenciales para las plantas, como nitrógeno, fósforo y potasio.
Para utilizar los fertilizantes líquidos orgánicos, simplemente siga las instrucciones del fabricante y agregue el fertilizante al agua de riego o rocíelo directamente sobre las hojas de las plantas. Los fertilizantes líquidos orgánicos son de absorción rápida y son ideales para proporcionar nutrientes inmediatos a las plantas.
6. Cáscaras de huevo:
Las cáscaras de huevo son una excelente fuente de calcio para las plantas. Cuando las cáscaras de huevo se descomponen en el suelo, liberan calcio lentamente, lo que es esencial para el crecimiento de las raíces y la formación de la pared celular de las plantas.
Para utilizar las cáscaras de huevo como fertilizante, simplemente tritúrelas en un molinillo de café o procesador de alimentos hasta que queden en polvo fino. Luego, agréguelas al suelo alrededor de sus plantas o mezcle el polvo de cáscaras de huevo con la tierra antes de plantar.
7. Té de compost:
El té de compost es un líquido rico en nutrientes que se produce al remojar compost en agua. El té de compost es una excelente manera de proporcionar nutrientes a las plantas de manera rápida y fácil.
Para hacer té de compost, simplemente coloque compost en una bolsa de tela y remójela en agua durante varias horas. Luego, retire la bolsa y use el líquido como fertilizante líquido para regar sus plantas. El té de compost es rico en nitrógeno, fósforo y potasio, y es ideal para promover el crecimiento saludable de las plantas.
Sub2. Tipos de Huertos
Sub3. Preparar la Tierra
